Volviendo a la infancia
Desde este fin de semana soy un poco más niña y es que una de mis mayores ilusiones de pequeña se hizo realidad el viernes cuando Benny me regaló un Tragabolas de viaje. Mis vecinos tenían uno y nos pasábamos las horas muertas jugando con él, pues algo parecido pasó el viernes cuando me lo dio, estuvimos jugando un buen rato con él y es que es un vicio, encima te picas por pillar las bolitas con los popopótamos. Lo siguiente que vendrá será el Simón de viaje, veras tú, nadie va a querer venir conmigo de excursión =P
Por cierto, os dejo una foto de mi Tragabolas, ¿a que mola?
Por cierto, os dejo una foto de mi Tragabolas, ¿a que mola?
3 comentarios:
¡ES PRECIOSO! Dios, yo tenía el de MB de toda la vida, con sus cuatro hipos (Zampón, Tragón, Comilón y no sé cómo era el otro, que tenían nombratu y tó) pero chica, este formato de viaje parece que me gusta más, con sus bolitas de colores y además pa echar un mano a mano. Genial. Tus amigos molan :D
Jeje, es que me conocen bien y más le vale, 3 años da pa mucho =P
Que recuerdos... Yo tenía uno de pequeño pero se perdían las bolas. Al final acababa poniendo canicas. Como hacía todo el mundo...
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